La agricultura evoluciona, y con ella, las herramientas que utilizamos para mejorar el rendimiento de los cultivos. Una de las prácticas más innovadoras es la fertilización con drones, una técnica que permite aplicar nutrientes de forma precisa, eficiente y con menor impacto sobre el suelo y el ambiente.

Consiste en el uso de drones equipados con sistemas de pulverización para distribuir fertilizantes líquidos de manera dirigida. A diferencia de los métodos tradicionales, los drones aplican solo la cantidad necesaria y justo donde el cultivo lo requiere evitando desperdicios.

Escuchar lo que el campo necesita

Estos drones están diseñados para operar con autonomía y precisión. Gracias a sensores, cámaras multiespectrales y sistemas GPS, identifican zonas específicas del terreno que presentan deficiencias nutricionales o signos de estrés. Con esta información, se generan mapas de aplicación variable que permiten realizar vuelos programados y distribuir los fertilizantes con máxima eficiencia.

Beneficios clave de la fertilización con drones

  • Precisión y eficiencia: Aplicación dirigida solo en las zonas que lo requieren, reduciendo el desperdicio y la lixiviación de nutrientes.
  • Ahorro de recursos: Al minimizar el uso de insumos, se reducen los costos operativos y el impacto ambiental.
  • Acceso a terrenos complejos: Funcionan en áreas de difícil acceso, como suelos encharcados o pendientes donde la maquinaria convencional no puede operar.
  • Monitoreo continuo: Además de fertilizar, permiten un seguimiento constante de la salud del cultivo, facilitando la detección temprana de plagas, enfermedades o carencias nutricionales.

Innovación y tecnología en nuestros cultivos 

En Sol de Levante, apostamos por la integración de tecnologías avanzadas en nuestros procesos agrícolas. La incorporación de drones en la fertilización no solo mejora la eficiencia y rentabilidad, sino que refuerza nuestro compromiso con una agricultura más sostenible y responsable.