La biodiversidad es un pilar fundamental para la supervivencia humana y la estabilidad del medio ambiente. Los ecosistemas saludables y diversos proporcionan servicios esenciales, como la polinización de cultivos, la protección contra plagas y enfermedades, y la mejora de la fertilidad del suelo. La conservación de la biodiversidad en la agricultura no solo garantiza la seguridad alimentaria, sino que también contribuye a la resiliencia frente a los desafíos del cambio climático. La diversidad de cultivos y la protección de hábitats naturales permiten a los agricultores adaptarse a condiciones cambiantes y reducir su vulnerabilidad.
Control biológico
Existen diversas formas de realizar un control biológico.
Lucha biológica
La lucha biológica es un método de control de plagas que consiste en la utilización de organismos vivos (parásitos, depredadores y patógenos), con el fin de controlar las poblaciones de otros organismos, sin la necesidad de aplicación de productos fitosanitarios.
- Hoteles de insectos
Favorece la polinización de nuestras plantas y cultivos lo que mejora su rendimiento y tiene un impacto positivo en las plantas. Los hoteles de insectos tienen una labor de control biológico de plagas, un método totalmente sostenible que evita su proliferación y favorecen la fertilidad del suelo.
- Lobularias
Muy utilizada en cultivos altamente sensibles al ataque de pulgón como lechuga y pimiento por su poder de atracción de sírfidos autóctonos. Actúa como planta cebo para trips y es el refugio ideal de Orius laevigatus.
Todas estas medidas pueden allanar el camino para una coexistencia productiva y sostenible. En Sol de Levante estamos comprometidos en ejecutar una agricultura sostenible.